Rafael Pujols con los detalles.
Lo que debes saber
- Los servicios de emergencias médicas declararon que los niños habían muerto a las 11:30 a. m. del lunes.
- El martes se dieron a conocer más detalles sobre las circunstancias de sus muertes, aunque la causa y la forma cómo sucedieron aún no estaban claras.
- Un funcionario encargado de hacer cumplir la ley dijo que las muertes parecían ser una tragedia médica, a la espera de los resultados de la autopsia. La madre participó activamente en la atención médica y la escolarización habituales de los niños.
NUEVA YORK -- Los gemelos de 5 años estaban echando espuma por la boca y la nariz cuando fueron encontrados misteriosamente muertos dentro de un apartamento de El Bronx el lunes, días después de que los enviaran a casa desde la escuela enfermos, con síntomas intensos y extraños, dijeron las autoridades.
Los informes toxicológicos aún estaban pendientes para el niño y la niña, que fueron encontrados alrededor de las 11:00 a. m. en una casa en East 175th Street entre Monroe Avenue y Topping Avenue en el vecindario de Morris Heights, dijeron funcionarios del FDNY y la Policía de la Ciudad de Nueva York. Su madre llamó al 911 y dijo que ninguno de los niños respiraba.
Los servicios de emergencias médicas declararon que los niños habían muerto a las 11:30 a. m.
El martes se dieron a conocer más detalles sobre las circunstancias de sus muertes, aunque la causa y la forma cómo sucedieron aún no estaban claras.
Los investigadores dijeron que los niños habían estado enfermos durante varios días y fueron enviados a casa desde la escuela la semana pasada. Ambos menores volvieron a faltar a la escuela el lunes. No estaba claro qué enfermedad tenían los niños, pero el niño había estado enfermo durante una o dos semanas con síntomas de resfriado, incluidos vómitos y secreción de moco verde. Y, según la policía, la niña había estado vomitando, lidiando con una infección de oído y actuando de manera irracional.
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No estaba claro exactamente de qué estaban enfermos. A ambos niños se les encontró echando espuma por la boca y la nariz, dijo la policía. Esto se produjo después de informes de que los niños actuaban de manera extraña e irracional en la escuela, incluso mordiendo y escupiendo. Al niño ya le habían diagnosticado con condiciones especiales, mientras que su hermana estaba en proceso de que la diagnosticaran
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La Policía de Nueva York dijo que no había signos de juego sucio, estrangulamiento o lesiones en los cuerpos, y que no había antecedentes de violencia doméstica por parte de nadie en el hogar. Los miembros del FDNY también analizaron el aire y no encontraron signos de monóxido de carbono, mientras que la policía dijo que no había signos de narcóticos u otra parafernalia de drogas dentro de la casa.
No se encontraron evidencias de ningún tipo de actividad criminal dentro de la casa. De hecho, la policía notó que el apartamento tenía buena calefacción y muchas comodidades para los niños.
La madre dijo que los vio con vida por última vez alrededor de las 5:00 a. m. del lunes. El padre, un profesional de la salud, había instado a la madre a llevar a los niños a la sala de emergencias antes de que murieran, dijeron las fuentes.
El padre, que no estaba en casa cuando se encontraron los niños, fue interrogado por la policía el lunes por la tarde después de regresar corriendo a casa desde el trabajo como asistente de atención médica domiciliaria en Port Chester. Mientras tanto, la madre había sido ingresada en el hospital por shock y trauma emocional.
La noticia de las trágicas muertes, apenas una semana antes de Navidad, sorprendió a los vecinos, que describieron a la madre como cariñosa y atenta.
"Cada vez que te ven te abrazan", dijo la vecina Jenny Rodríguez. "Es tan desgarrador".
El pastor Randholf Andujar dirige una despensa de alimentos los lunes en el sótano del edificio donde vivían los gemelos. Dijo que los veía a ellos y a su madre al frente de la fila todas las semanas.
"Ella fue muy dulce, siempre los cuidó. Ellos fueron respetuosos, la señora fue respetuosa", dijo Andújar. "Cada vez que te veían, te abrazaban… buenos niños. Es simplemente desgarrador".
La familia emigró de Ghana. A los niños no se les hizo la prueba de COVID-19.
Un funcionario encargado de hacer cumplir la ley dijo que las muertes parecían ser una tragedia médica, a la espera de los resultados de la autopsia. La madre participó activamente en la atención médica y la escolarización habituales de los niños.
