NUEVA YORK -- Todos los neoyorquinos lo han visto, o peor aún, han tenido que lidiar con vivir cerca de él: andamios fuera de los edificios que han estado en las aceras aparentemente desde siempre. Ha sido un problema continuo durante décadas, pero ahora los legisladores están intentando nuevamente derribar los cobertizos en las aceras.
La administración de Bloomberg predijo un auge de cobertizos en las aceras para cumplir con la ley local 11, que es una medida de seguridad diseñada para proteger a los peatones. El problema es que esa ley creó un efecto secundario no deseado: muchos propietarios mantuvieron los cobertizos en las aceras. Es una opción más económica que las costosas reparaciones de fachadas.
Según una estimación, hay más de 4,000 solo en Manhattan. No son solo los propietarios y las empresas quienes han abusado del sistema: a veces, el propietario era la ciudad.
“Todos los cobertizos de los proyectos de la ciudad estarán caídos. Literalmente hasta el último”, dijo el entonces alcalde Bill de Blasio en 2017.
Eso no llegó a buen término. Pero ahora una nueva generación de líderes lo intenta de nuevo.
“Los cobertizos no manejan esta ciudad que nosotros manejamos”, dijo el concejal de la ciudad Shaun Abrey, quien representa a Manhattan.
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Los miembros del Concejo se reunieron el lunes con el presidente del condado de Manhattan, Mark Levine, quien dijo que su nuevo plan tiene la receta correcta.
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“Queremos que el trabajo de la fachada se haga más rápido, porque eso suele ser lo que deja estos andamios levantados”, dijo Levine. “Es una plaga en nuestros vecindarios”.
Levine también dijo que la nueva tecnología de drones podría acelerar las inspecciones de edificios, lo que significaría permisos y trabajos más rápidos. Desde 2019, la ciudad inspecciona regularmente todos los proyectos de andamios que han estado en funcionamiento durante al menos cinco años.
Aquí hay un desglose del plan de Levine para deshacerse de los cobertizos, que depende de:
- Fondo de préstamos a bajo interés para que los propietarios puedan hacer reparaciones.
- Permisos simplificados para hacer la construcción.
- Multas más elevadas para quienes descuidan el trabajo.
Dadas las promesas pasadas que no se cumplieron, es natural preguntarse: ¿Por qué debería funcionar esta vez?
“Estamos presentando propuestas que no se habían dciho antes”, dijo Levine.
La administración de Adams dice que ya han hecho mella: los cobertizos en las aceras han bajado un 21 por ciento, con un total de poco más de 9,000 ahora en comparación con los 11,300 hace tres años, según el Ayuntamiento.
Un cobertizo en la acera de East Harlem que había estado instalado desde 2003 fue derribado el año pasado, al igual que los que se instalaron en 2008 y 2009. Hubo al menos una docena de cobertizos derribados en los últimos 2 años o más que habían estado en funcionamiento durante más de siete años. .
Si bien eso puede no ser notable, la ciudad dice que han agregado cumplimiento. Los cobertizos de acera de mayor duración recibirán inspecciones adicionales para asegurarse de que alguien tenga un plan para arreglarlo y arreglar la vista.
“Como dijo el alcalde Adams en su discurso sobre el estado de la ciudad en enero, esta administración está enfocada con precisión en recuperar espacios públicos valiosos para los neoyorquinos, fortalecer la supervisión de los cobertizos en las aceras de larga data y mejorar los requisitos de diseño de los cobertizos para mantener vibrantes los paisajes urbanos de nuestra ciudad. Apreciamos las recomendaciones del presidente del condado y esperamos revisar sus propuestas específicas”, se lee en un comunicado del Departamento de Edificios.
Parte de la disminución de los andamios en las aceras puede deberse a las nuevas iniciativas de supervisión iniciadas en 2019, que tenían como objetivo aumentar la seguridad de las fachadas y tomar medidas enérgicas contra los cobertizos de larga data.
Para aquellos que se preguntan, el cobertizo en la acera más antiguo que se encuentra actualmente en pie en la ciudad está ubicado en 409 Edgecomb Avenue, cerca de 155th Street en Harlem, que alguna vez fue el hogar de Thurgood Marshall y W.E.B. DuBois. El edificio ha tenido andamios frente a él desde abril de 2006, según un informe del NY Post de 2019.
Una fuente le dijo a NBC New York que los propietarios del edificio recientemente se declararon culpables en un caso penal, que fue presentado por el DOB de la ciudad. Como parte de la declaración de culpabilidad, acordaron terminar las reparaciones en el edificio en 2023, para poder retirar el cobertizo.
