LO QUE DEBES SABER
- La opulenta casa de Ivana Trump en Manhattan todavía está en el mercado después de un año.
- El mes pasado, el precio se redujo en $4 millones, hasta $22.5 millones.
- Ivana Trump murió el año pasado. Las ganancias de la venta se destinarán a su patrimonio, que beneficia a los niños Donald Jr., Ivanka y Eric.
La casa adosada de la fallecida Ivana Trump en Nueva York ha estado en el mercado durante un año completo sin compradores. En septiembre, sufrió un recorte de 4 millones de dólares de su precio de venta original, hasta $22.5 millones.
La extravagante residencia permanece prácticamente intacta desde su muerte en julio de 2022. De hecho, muy poco ha cambiado desde que Ivana Trump, la primera exesposa del expresidente Donald Trump, renovó la casa en la década de 1990.
"Es muy hermosa y muy francesa, con sabor a Versalles por dentro", según el agente inmobiliario de la casa, J. Roger Erickson de Douglas Elliman. Fue contratado por el patrimonio de Ivana Trump, que beneficia a sus tres hijos Ivanka, Donald Jr. y Eric, según Erickson.
La casa adosada de seis pisos y casi 8,800 pies cuadrados fue construida en 1879. Todavía está decorada con muebles de la fallecida Ivana Trump, revestida con alfombras rojas y paredes cubiertas de seda roja, y llena de detalles dorados y candelabros de cristal ornamentados.
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"Ivana dijo que 'la casa es como Luis XVI habría vivido si tuviera dinero', y eso lo resume perfectamente en sus propias palabras", dijo Erickson.
En muchos casos, los vendedores organizan sus casas profesionalmente para hacerlas más atractivas para los posibles compradores. En este caso, los interiores del 10 E. 64th St. todavía son del gusto de su difunto propietario.
Desde su muerte por una caída en la gran escalera de la casa, la residencia sigue siendo una cápsula del tiempo, con fotografías familiares todavía adornando paredes y estantes. Un gran cartel de una de las apariciones de Ivana en la portada de una revista cuelga de una pared fuera de la oficina central. Su libro “Raising Trump” está sobre la mesa de café de la sala de estar.
Evan Joseph/Douglas Elliman
Los registros públicos muestran que Ivana compró la casa adosada de piedra caliza en 1992 por $2.5 millones. Según Erickson, estaba en mal estado cuando Ivana lo compró y gastó millones para renovarlo e infundir a cada piso su estilo distintivo.
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"Durante 30 años, el mercado se ha disparado", dijo Erickson.
El último precio de venta sitúa el precio de la casa por pie cuadrado en poco menos de $2,600, en línea con el precio promedio por pie cuadrado para las ventas de casas de lujo (el 10% superior de las ventas) observado en el tercer trimestre, según el informe Elliman.
Sin embargo, la propiedad, que salió a la venta en noviembre pasado, ha estado en el mercado más tiempo que el promedio para una casa adosada en Nueva York, que estuvo aproximadamente cinco meses y medio en el mismo trimestre y se midió desde el último cambio de precio hasta la fecha del contrato, según Jonathan Miller, presidente de Miller Samuel Inc., una firma de consultoría y tasación de bienes raíces.
Cuando propiedades como esta permanecen en el mercado por más tiempo que el tiempo promedio de comercialización, es probable que el precio del listado sea excesivo, dijo Miller a CNBC.
"La decoración interior altamente personalizada de esta casa probablemente también esté contribuyendo al retraso en la comercialización desde entonces", dijo Miller.
Sólo el tiempo dirá si la reciente reducción en el precio de venta ayudará a vender la casa.
Aquí hay un vistazo a la antigua residencia de Ivana Trump.
El antiguo dormitorio con baño de Ivana se extiende por todo el tercer piso e incluye chimenea y terraza.
El baño principal está cubierto de ónix rosa, espejos y accesorios dorados. Se abre tanto al dormitorio como a una biblioteca con temática de leopardo.
Los muebles de la biblioteca están tapizados con un patrón de lunares, al igual que las almohadas, las paredes y las alfombras. La habitación está decorada con pinturas que representan leopardos, una pequeña muñeca rubia con un abrigo de piel sentada en el sofá de leopardo, una bandeja adornada con un gato montés y un retrato fotográfico de una joven Ivanka con su madre. Ambas aparecen sentadas en el sofá de leopardo de la habitación con Ivana con un vestido de leopardo mientras besa la mejilla de su hija.
Entre los cinco dormitorios de la casa se encuentra la antigua suite de Ivanka, que incluye una chimenea y una cama con dosel que todavía está adornada con una corona dorada en la parte superior. En el baño, algunos de los azulejos de cerámica de las paredes y de la ducha están personalizados con "Ivanka" escrito a mano y adornado con corazones.
Junto a una pequeña cocina en el segundo piso hay un pequeño comedor con una lámpara de araña de cristal que cuelga directamente debajo de un tragaluz. Los hijos de Ivana considerarían vender la casa completamente amueblada, dijo Erickson a CNBC.
En la parte trasera de la casa hay un patio de ladrillo de 700 pies cuadrados.
Los impuestos inmobiliarios sobre la residencia son de casi $10,900 al mes o alrededor de $130,000 al año, según el listado.
Este artículo fue publicado originalmente en inglés por Ray Parisi para nuestra cadena hermana CNBC.com. Para más de CNBC entra aquí.
