Lo que debes saber
- El jueves es el segundo día de testimonio de los hijos adultos de Donald Trump en el juicio por fraude civil de $250 millones contra la familia del expresidente y su empresa.
- Donald Trump Jr. volvió a subir al estrado para responder más preguntas de la oficina de la fiscal general Letitia James. Le siguió su hermano, Eric Trump, quien también trabajó como vicepresidente ejecutivo de la empresa.
- El miércoles, Trump Jr. enfrentó preguntas sobre su papel en la Organización Trump, especialmente en lo que se relacionaba con los estados financieros que, según la oficina de James, estaban inflados deliberadamente para beneficiar a la compañía.
NUEVA YORK - Eric Trump, uno de los dos hijos a quienes se confió la dirección del imperio inmobiliario de Donald Trump, juró el jueves que nunca estuvo involucrado ni tuvo conocimiento de declaraciones financieras que, según los abogados estatales, engrandecieron fraudulentamente la riqueza del expresidente y el valor de la empresa familiar.
Pero cuando un abogado del estado de Nueva York encontró correos electrónicos de hace una década en los que un colega ejecutivo de la Organización Trump le pedía la información necesaria para completar uno de los estados financieros de su padre, el irritado hijo se esforzó por aclararlo.
“Somos una organización importante, una organización inmobiliaria enorme; sí, estoy bastante seguro de que entiendo que tenemos estados financieros. Absolutamente”, testificó Eric Trump. Pero insistió: “No tuve ninguna participación y nunca trabajé en la declaración de situación financiera de mi padre”.
Eric Trump siguió a su hermano Donald Trump Jr. al estrado de los testigos el jueves en el juicio por fraude civil de la familia en Nueva York, un preludio del testimonio programado de su padre para el lunes. Ambos hijos son vicepresidentes ejecutivos de la Organización Trump.
Respondiendo preguntas por segundo día, Trump Jr. también reveló que el gigante del juego Bally's pagó recientemente a su empresa 60 millones de dólares para comprar el derecho a operar un campo de golf público en la Ciudad de Nueva York. Los términos de la transferencia del arrendamiento del antiguo Trump Golf Links Ferry Point en El Bronx no se habían revelado previamente.
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La venta se produjo después de que la ciudad se esforzara por poner fin a la asociación de Donald Trump con el campo después del ataque del 6 de enero de 2021 al Capitolio de Estados Unidos. La empresa administró el campo de 18 hoyos, ahora llamado Bally's Golf Links en Ferry Point, hasta este año.
La fiscal general de Nueva York, Letitia James, está demandando a Donald Trump, su empresa y altos ejecutivos, incluidos Eric y Donald Jr., acusándolos de inflar el patrimonio neto del expresidente en los estados financieros anuales que se entregaban a bancos, aseguradoras y otros para garantizar préstamos y hacer tratos.
El expresidente y otros acusados niegan haber actuado mal.
Donald Trump, el favorito para la nominación republicana de 2024, reiteró el jueves en su plataforma Truth Social que considera que el juicio es “AMAÑOADO”, un “error judicial” y una “interferencia electoral”. James y el juez que decidirá el caso, Arthur Engoron, son demócratas.
"La Organización Trump es financieramente fuerte, poderosa, muy líquida y no ha hecho nada malo", escribió Trump.
Eric Trump, al comenzar su testimonio, dijo que “nunca tuvo nada que ver con la declaración de situación financiera”, no creía haber visto una y “no sabía nada al respecto, en realidad, hasta este caso”.
"No es lo que hice por la empresa", dijo el hijo, quien ha insistido en que sus intereses residen principalmente en "verter hormigón": construir y operar propiedades. Dijo que si bien sabía que la empresa tenía documentos financieros, "no estaba personalmente al tanto de la declaración de situación financiera".
El abogado estatal Andrew Amer luego le mostró correos electrónicos de 2013 del entonces controlador de la Organización Trump, Jeffrey McConney, quien le explicó a Eric Trump que estaba “trabajando en la declaración de situación financiera de su padre” y necesitaba información sobre una de las propiedades de la compañía.
"¿Entonces sabías sobre el estado financiero anual de tu padre en agosto de 2013?" preguntó Amer.
“Parece ser así”, testificó Eric Trump, que en ese momento era un ejecutivo de nivel inferior.
En otro correo electrónico de ese año, McConney dijo que estaba “trabajando en las notas del estado financiero anual del Sr. Trump” y pidió a Eric y a otros una actualización sobre cualquier trabajo de construcción importante que se hubiera iniciado recientemente.
“Sí, sé que Jeff McConney hace estados financieros para mi padre”, dijo Eric Trump, echándose hacia atrás en su silla y ajustándose la chaqueta del traje. Cuando se le hizo una pregunta en el mismo sentido, respondió que la empresa es una "organización inmobiliaria masiva", y alzó la voz mientras hablaba.
Donald Trump Jr. testificó el jueves temprano que, a pesar de las acusaciones de James, todavía creía que los estados financieros de su padre eran "materialmente precisos". Su padre ha dicho que, en todo caso, las cifras que figuran en los documentos redujeron su riqueza y el valor de sus rascacielos, campos de golf y otras propiedades.
Haciéndose eco de su testimonio del miércoles, Trump Jr. insistió en que se ocupó de los estados financieros sólo de pasada: aprobándolos como fiduciario del fideicomiso de su padre y entregándolos a los prestamistas para que cumplieran con los requisitos del préstamo. Reiteró que lo hizo confiando en las garantías de los ejecutivos financieros de la empresa y de una firma de contabilidad externa de que la información era precisa.
"Si me hubieran asegurado en su opinión experta que estas cosas estaban bien, lo habría aceptado y habría firmado en consecuencia", testificó.
Afuera del tribunal, Trump Jr. dijo a los periodistas que pensaba que su testimonio fue “muy bien, si realmente estuviéramos lidiando con la lógica y la razón, la forma en que se llevan a cabo los negocios”.
“Desafortunadamente, la fiscal general ha presentado un caso que es puramente una persecución política”, dijo. "Creo que es un precedente realmente aterrador para Nueva York: para mí, por ejemplo, antes incluso de tener un día en la corte, aparentemente soy culpable de fraude por confiar en que mis contadores hagan, esperen: contabilidad".
CUÁLES OTROS TESTIMONIOS SE ESPERAN
Se espera que Eric Trump sea el próximo en subir al estrado el jueves. Luego, el lunes está previsto que el expresidente, patriarca de la familia y favorito republicano para 2024, también testifique. Los abogados estatales esperaban llamar a su hija mayor, la exejecutiva de la Organización Trump y asesora de la Casa Blanca Ivanka Trump, como su último testigo el 8 de noviembre. El miércoles, su abogado presentó una apelación impugnando la decisión de un juez de exigir su testimonio.
Se espera que la oficina de James le pregunte a Ivanka Trump sobre su apartamento en Park Avenue, así como sobre varios préstamos que ayudó a negociar para la empresa.
En una declaración de Eric Trump, este dijo que su padre había sido el director de la empresa durante mucho tiempo y reconoció que, aunque ya no dirige las operaciones diarias, si hubiera algo que su padre quisiera que se hiciera, Eric y Donald Trump Jr, lo más probable es que lo haga.
"Bueno, al fin y al cabo, mi padre es el dueño de la empresa. Así que creo que cualquier propietario de la empresa siempre está en la cima de la pirámide", testificó Eric Trump sobre el papel de su padre antes de convertirse en presidente. Cuando se le preguntó si su padre estaba ahora nuevamente en la cima de la pirámide, dijo: "Ya sabes, en cierta manera, tal vez".
QUÉ DICE LA DEMANDA CONTRA TRUMP
James, una demócrata, alega que Donald Trump, su empresa y altos ejecutivos, incluidos sus hijos Eric Trump y Donald Trump Jr., conspiraron para exagerar su riqueza en miles de millones de dólares en sus estados financieros que fueron entregados a bancos, aseguradoras y otros para asegurar préstamos y hacer tratos.
Además de pedir $250 millones por daños y perjuicios, la demanda busca impedir que Trump y sus hijos se desempeñen como funcionarios o directores de cualquier corporación de Nueva York.
Trump Jr. y Weisselberg eran los responsables de firmar los estados financieros de la empresa, presentándolos como precisos y compilados de acuerdo con las prácticas contables aceptadas. La oficina de James alega que ninguna de esas declaraciones es cierta.
La presentación también señalaba que uno de los apartamentos en el edificio estaba valorado en $25 millones , a pesar de que Ivanka Trump, que lo había estado alquilando, tenía la opción de comprarlo por $8.5 millones.
