Los residentes argumentaron que solo buscaban un alivio al calor extremo, aunque la fiesta en la piscina fue demasiado breve ante la llegada de la uniformada.
NUEVA YORK - El vecindario predominantemente dominicano de Washington Heights acaparó la atención de las fuerzas del orden, luego de que un residente instalara una piscina inflable para el disfrute de las familias del área como alivio al calor extremo de los últimos días.
Pero la fiesta fue breve, ya que la policía obligó a los residentes a desmantelar la piscina al recibir varias quejas de vecinos.
“Cien grados y no podemos ir para ningún lado. Mucha gente no tiene dinero para meterse a un carro e irse a un lago”, dijo Joshua Torres, encargado del edificio frente al cual se instaló la piscina.
Torres y sus vecinos colocaron la piscina de 18 pies en la calle Audubon y luego invitaron a todo aquel que caminaba por allí para disfrutar del agua refrescante, y muchos aceptaron con gusto, en especial los niños aburridos del encierro en casa.
“Pensaba en otra cosa, los problemas se me fueron un poco”, dijo Carmen Fernández, una de las bañistas.
“Vienen niños, mayores de edad, la juventud. Esto fue una idea para traer la comunidad junta”, expresó Alvin Marte, otro residente del sector. “Estaban contentos, yo nunca habían visto esto aquí”.
El oasis en plena calle brindó frescura y diversión solo por seis días. El NYPD desmanteló todo el miércoles por la mañana.
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“Ayer yo bajé y pasé un momento muy agradable con la niña, que ella quería entrar a la piscina y se sintió muy bien, me sorprendió que la quitaron hoy”, se lamentó Yanet de Plano, vecina del área.
Pero Torres afirma que no todo está dicho. Por ahora decidió acatar las órdenes de la uniformada, aunque promete volver con una piscina más pequeña en cuanto sea posible y bajo las normas de las autoridades.
“Voy a esperar un tiempito y voy a ver si compro una más chiquita para no traer ‘calentón’ (problemas) para acá”, expresó.
