NUEVA YORK -- Alrededor de 70,000 solicitantes de asilo han llegado a la Ciudad de Nueva York en el último año, y el alcalde Eric Adams señaló que cientos más llegan todos los días.
La Ciudad y el Estado han buscado alternaivas de refugios para alojar a los miles de migrantes, y en medio de esa crisis migratoria organizaciones y centros religiosos han empezado por su parte a usar sus instalaciones para albergar solicitantes de asilo gracias a convenios que se crean con la ciudad.
Uno de esos convenios es con el Centro Comunitario Musulmán ubicado en Brooklyn que ya ha recibido a unos 75 migrantes. Por su parte, según reportó CNN, la Gran Manzana también tiene otro tipos de contratos como con New York Disaster Interfaith Services, para brindar la misma ayuda.
Esta no es la primera vez que los centros religiosos o las iglesias de la ciudad abren sus puertas para ayudar o refugiar a migrantes en medio de crisis.
“Nosotros hemos puesto tres aplicaciones por tres Iglesias diferentes que tenemos, una en Brooklyn y dos en el área de Queens, que estamos esperando que nos llamen para comenzar a trabajar", dijo el Padre Mike Lopez de la Parroquia de Todos los Santos.
Pero además de alojamientos, las organizaciones ya están preparando comida, con el sabor latino, para ser llevadas a los albergues, como parte de los contratos de alimentación que adelanta la ciudad.
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“Nuestra organización tiene un subcontrato para preparar comida para los albergues de la ciudad, y estamos trabajando en eso, preparando comida de dignidad, comida que las personas están llegando les guste y sea saludable para ellos también", dijo Lopez.
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Este fin de semana, también se dio a conocer que la Instalación de Prisiones de Lincoln, una antigua cárcel en Harlem e instalación estatal, albergará temporalmente a los migrantes luego de que la gobernadora Kathy Hochul lo autorizó el domingo. Todavía no está claro cuándo y cómo se mudarán, pero se sabe que no se permitirán familias con menores.
Las soluciones para albergar a los migrantes han generado controversias. Entre esas el plan de Nueva York de usar gimnasios de escuelas como refugios de emergencia para migrantes, o enviarlos a otros condados del Estado, donde los funcionarios de estos lugares emitieron estados de emergencia para detener la medida.
