Activista arrestado por protestas en la Universidad de Columbia brinda su primera declaración pública

NUEVA YORK -- Un estudiante de la Universidad de Columbia, arrestado y amenazado con la deportación por su participación en las protestas del campus contra Israel, hizo su primera declaración pública el martes, afirmando que su detención es un indicio del "racismo antipalestino" demostrado por las administraciones de Trump y Biden.

En una carta dictada desde una cárcel de inmigración de Luisiana y publicada por su abogado, el estudiante, Mahmoud Khalil, afirmó que está siendo objeto de persecución como parte de un esfuerzo mayor para reprimir las voces palestinas.

"Mi injusta detención es un indicio del racismo antipalestino que las administraciones de Biden y Trump han demostrado durante los últimos 16 meses, mientras Estados Unidos continúa suministrando armas a Israel para matar palestinos e impide la intervención internacional", declaró.

"Durante décadas, el racismo antipalestino ha impulsado los esfuerzos para expandir las leyes y prácticas estadounidenses que se utilizan para reprimir violentamente a palestinos, árabes estadounidenses y otras comunidades. Precisamente por eso estoy siendo objeto de persecución".

Khalil y el Gobierno federal han estado discutiendo en los tribunales sobre la decisión de la administración Trump de enviarlo al otro lado del país, a la cárcel de Luisiana.

El Gobierno afirma que no pudo ser detenido en un centro de inmigración cerca de donde fue arrestado originalmente, en parte debido a una plaga de chinches, por lo que lo enviaron a Luisiana. Khalil afirma que no hubo tal discusión sobre las chinches y que temía ser deportado de inmediato.

Khalil declaró el lunes ante el tribunal federal de Manhattan que, mientras estuvo retenido durante la noche en un centro de detención en Elizabeth, Nueva Jersey, "no escuché a nadie mencionar chinches".

En documentos judiciales presentados el fin de semana, los abogados del Departamento de Justicia también atribuyeron su decisión a la sobrepoblación de las instalaciones en el noreste.

Khalil hizo la declaración sobre las chinches en un anexo a los documentos judiciales, en el que sus abogados solicitaron su libertad bajo fianza mientras los tribunales deciden si su arresto violó la Primera Enmienda.

Los abogados también han solicitado a un juez que amplíe el efecto de cualquier orden para impedir que el Gobierno estadounidense "arreste, detenga y expulse a extranjeros que participan en actividades expresivas protegidas constitucionalmente en Estados Unidos en apoyo de los derechos de los palestinos o que critican a Israel".

Khalil declaró en los registros judiciales que lo subieron a una camioneta cuando lo sacaron del centro de detención de Elizabeth y preguntó si lo devolvían a la sede del FBI en Manhattan, adonde fue llevado inmediatamente después de su arresto. “Me dijeron: ‘No, vamos al aeropuerto JFK’. Tenía miedo de que intentaran deportarme”, recordó.

Sobre el tiempo que pasó en el centro de detención de Elizabeth, escribió: “Estaba en una sala de espera con unas diez personas más. Dormíamos en el suelo. Aunque hacía frío dentro de la habitación, no había camas, colchones ni mantas”.

Khalil, en la carta publicada por su abogado el martes, declaró: “Veo en mis circunstancias similitudes con el uso que hace Israel de la detención administrativa (encarcelamiento sin juicio ni cargos) para despojar a los palestinos de sus derechos”.

“Para los palestinos, el encarcelamiento sin el debido proceso es algo habitual”, afirmó.

En los documentos judiciales del fin de semana, los abogados del Departamento de Justicia describieron detalladamente el arresto de Khalil el 8 de marzo y su traslado de Manhattan a Elizabeth y luego al Aeropuerto Internacional Kennedy de Nueva York al día siguiente para su traslado a Luisiana, donde permanece recluido desde entonces.

“Khalil no pudo permanecer alojado en el Centro de Detención de Elizabeth a largo plazo debido a un problema de chinches, por lo que permaneció allí hasta su vuelo a Luisiana”, escribieron los abogados. Dijeron que estuvo en el centro desde las 2:20 a. m. hasta las 11:30 a. m. del 9 de marzo.

Los abogados han solicitado que los asuntos legales sean abordados por jueces federales de Nueva Jersey o Luisiana, en lugar de Nueva York. Un juez federal de Manhattan aún no se ha pronunciado sobre la solicitud.

Los abogados de Khalil, que se oponen a la transferencia del caso, escribieron en una presentación el lunes que la transferencia a Luisiana fue "predeterminada y llevada a cabo por motivos indebidos" y no por una infestación de chinches.

A pesar de la denuncia sobre la infestación de chinches, el Centro de Detención de Elizabeth aceptó al menos a cuatro personas para su detención desde el 6 de marzo hasta el jueves pasado, y el propio Khalil presenció cómo procesaban a hombres para su detención mientras estuvo allí, escribieron.

Khalil, en la carta publicada por su abogado el martes, también hizo referencia a una ola de ataques israelíes en Gaza, que puso fin al alto el fuego el lunes por la noche, y calificó de "imperativo moral" continuar luchando por la libertad de los palestinos.

“Tras la ruptura del alto el fuego de enero, los padres en Gaza vuelven a acunar sudarios demasiado pequeños, y las familias se ven obligadas a sopesar el hambre y el desplazamiento frente a las bombas”, declaró. “Es nuestro imperativo moral persistir en la lucha por su completa libertad”.