NUEVA YORK -- El fin de semana del Día de los Caídos marca el inicio no oficial del verano, y con él viene la anticipación de un aumento en los viajes, que se espera que alcance niveles sin precedentes este año.
Y para aquellos que se dirigen al aeropuerto más transitado del área de los tres estados durante el verano, podría significar un territorio inexplorado para los atascos de tráfico, debido en parte a importantes planes de construcción.
La Administración de Seguridad del Transporte (TSA) dijo que prevé inspeccionar a más de tres millones de pasajeros en todo Estados Unidos en un solo día en algún momento durante este verano, una cifra que nunca antes se había alcanzado, según la agencia.
Antes de ese momento, la TSA dijo que durante el jueves y viernes antes del fin de semana del Día de los Caídos, más de 2.9 millones de pasajeros podrían pasar por los puntos de control en los EEUU. La agencia dijo que está preparada para manejar el aumento de viajeros, quienes volarán desde los aeropuertos internacionales JFK y LaGuardia durante el fin de semana festivo.
"Aquí en el Aeropuerto LaGuardia, esperamos ver un aumento de alrededor del 10 por ciento más de viajeros por día durante el fin de semana del Memorial Day que lo que vemos en un fin de semana promedio", dijo Robert Duffy, Director de Seguridad Federal de la TSA para el Aeropuerto LaGuardia.
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En el aeropuerto JFK, la TSA espera inspeccionar a unos 12,000 viajeros más cada día durante el fin de semana del Día de los Caídos en comparación con un fin de semana típico, dijo el Director de Seguridad Federal de la TSA para el Aeropuerto Internacional JFK, John Essig. Eso marcaría un aumento del 11.5% de viajeros a partir de 2023.
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Pero si bien la TSA puede estar lista, la Autoridad Portuaria de Nueva York y Nueva Jersey advierte a los viajeros que se preparen para lo peor en lo que respecta al tráfico que llega al aeropuerto, particularmente al JFK.
"Cuando vengas a JFK este verano, tómate un tiempo extra", dijo el director ejecutivo de la Autoridad Portuaria, Rick Cotton. "Pedimos disculpas de antemano".
Cotton pide disculpas por lo que probablemente serán entre 15 y 30 minutos adicionales de conducción, o incluso más, para aquellos que dejan el auto directamente en la terminal (eso también se aplica a taxis y aplicaciones de viajes compartidos como Uber y Lyft). Es probable que se produzcan cierres de carriles y desvíos.
Llegar al aeropuerto podría ser aún más difícil para las personas que vienen de los condados de Suffolk y Nassau en Long Island.
"Si viaja desde Long Island a la Terminal 1, espere otros 10 a 15 minutos de viaje", dijo Jessica Forse, ejecutiva de proyectos del Programa de Reurbanización del Aeropuerto JFK.
La Autoridad Portuaria dijo que el estancamiento se deberá a una remodelación de 19 mil millones de dólares en el aeropuerto JFK, uno de los proyectos de infraestructura más grandes del país.
Cuando se les preguntó si podían imaginarse a la gente saltando de sus automóviles y cruzando la carretera hacia las terminales como lo hicieron alguna vez en el aeropuerto LaGuardia, Cotton dijo "rezamos" para que eso no suceda.
La Autoridad Portuaria señaló que debido a la enorme cantidad de construcción, está considerando ofrecer viajes en AirTrain con descuento (y posiblemente incluso gratuitos) este verano. Actualmente, el AirTrain cuesta $8.50 por persona desde los centros de Jamaica y Howard Beach, un precio que rápidamente aumenta para las familias que viajan. Aún no se ha tomado ninguna decisión.
"Vamos a considerar todas las opciones", dijo Cotton.
Los funcionarios del aeropuerto recomendaron encarecidamente a los viajeros que utilizaran el transporte público para llegar a JFK. La Autoridad Portuaria instó a los viajeros a dejarse en el estacionamiento de Lefferts Boulevard, que ofrece un viaje gratuito en AirTrain a las terminales. El lote de Lefferts será una zona de espera gratuita a partir de junio.
El proyecto del aeropuerto no estará completo hasta 2030, pero muchas de las nuevas puertas se abrirán en 2026. La remodelación implica consolidar ocho terminales en cuatro, junto con seis millas de nuevas carreteras.
"Transformará lo que habitualmente se ha calificado como uno de los peores aeropuertos en uno de los mejores del mundo", dijo Cotton. "Durante los próximos dos años, la construcción avanzará a un ritmo vertiginoso".
