MIAMI - El gobierno estadounidense sancionó el jueves a la pandilla venezolana Tren de Aragua al considerarla una organización criminal transnacional, y ofreció $12 millones como recompensa por el arresto de sus líderes.
Washington acusa a la otrora pandilla carcelaria de propagarse por Latinoamérica con una actividad criminal que incluye secuestros, extorsiones y tráfico humano.
El Tren de Aragua se suma así a la pandilla salvadoreña MS-13 y a la Camorra italiana en una lista de organizaciones criminales transnacionales que tienen prohibido hacer negocios en Estados Unidos.
“Tren de Aragua representa una amenaza criminal mortal en toda la región”, indicó el Departamento del Tesoro de Estados Unidos en un comunicado, añadiendo que con frecuencia se aprovecha de poblaciones vulnerables, como mujeres y niñas migrantes, para el tráfico sexual.
“Cuando las víctimas buscan escapar de esta explotación, los miembros del Tren de Aragua a menudo las matan y publicitan sus muertes como una amenaza para otras”, agrega el comunicado.
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El Tren de Aragua se originó en las caóticas prisiones de Venezuela, pero se ha expandido en los últimos años a costa de millones de inmigrantes venezolanos desesperados que han huido del gobierno del presidente Nicolás Maduro y han establecido su residencia en otras partes de Latinoamérica o Estados Unidos.
Las autoridades de países como Colombia, Perú y Ecuador —con grandes poblaciones de inmigrantes venezolanos— han acusado al grupo de estar detrás de una serie de crímenes violentos en una región que durante mucho tiempo ha tenido algunas de las tasas de homicidios más altas del mundo.
Inicialmente se dedicaba a explotar a los inmigrantes venezolanos mediante la usura, la trata de personas y el contrabando de mercancías hacia y desde Venezuela.
Pero conforme la diáspora venezolana se ha asentado de manera más permanente en el extranjero, se ha unido —y en ocasiones se ha enfrentado— con sindicatos criminales locales dedicados al narcotráfico, la extorsión de negocios locales y a los asesinatos por encargo.
El Departamento del Tesoro señala que la pandilla se ha asociado con bandas como Primeiro Comando da Capital, un notorio grupo del crimen organizado de Brasil que también ha sido sancionado por Estados Unidos.
A principios de este año, los fiscales de Chile culparon a la pandilla del asesinato de un oficial del ejército venezolano que había buscado refugio en ese país después de participar en un complot fallido para derrocar a Maduro.
“El Tren de Aragua no es una estructura criminal integrada verticalmente, sino más bien una federación de diferentes pandillas”, explicó Jeremy McDermott, codirector de InSight Crime con sede en Colombia, que este mes publicó un informe sobre la expansión de la pandilla.
“Ahora se ha convertido en un nombre de franquicia para las estructuras criminales venezolanas que operan en la región, con una coherencia debilitada ahora que su base penitenciaria ya no existe”, añadió McDermott.
El grupo está liderado por Héctor Guerrero, quien fue encarcelado hace años por matar a un policía, según InSight Crime. Guerrero, más conocido por su alias “El Niño”, luego se fugó y posteriormente fue recapturado en 2013, regresando a la prisión de Aragua donde entonces tenía su sede la banda criminal.
Volvió a huir de prisión más recientemente, cuando las autoridades venezolanas intentaron reafirmar el control sobre su población penitenciaria.
Se desconoce su paradero actual, pero el Departamento de Estado de Estados Unidos, que ha ofrecido hasta 12 millones de dólares por su arresto y el de otros dos líderes de pandillas, dijo que cree que Guerrero y Giovanny San Vicente, otro objetivo de la recompensa estadounidense, radican en Colombia.
El senador Marco Rubio, republicano de Florida y copresidente de la Comisión Selecta de Inteligencia del Senado, advirtió que si no se controla, el Tren de Aragua también podría comenzar a aterrorizar a ciudades estadounidenses.
Entre los casi 1 millón de inmigrantes venezolanos que han cruzado a Estados Unidos en los últimos años se encuentran presuntos pandilleros implicados en tiroteos contra policías, tráfico de personas y otros delitos, aunque no hay evidencia de que la pandilla haya establecido una estructura organizacional en Estados Unidos, de acuerdo con McDermott.
“Ahora estamos viendo pruebas de que han llegado a Estados Unidos. Todos los días vemos reportes desde Chicago, el sur de Florida y Nueva York de que estos pandilleros ya están aquí”, dijo Rubio en una audiencia en el Senado en abril.
En un comunicado emitido el jueves, la Casa Blanca anunció que el Departamento de Seguridad Nacional ha mejorado los sistemas para detectar e identificar mejor a miembros de pandillas conocidos o sospechosos, incluyendo integrantes del Tren de Aragua.