NUEVA YORK -- Cientos de miles de espectadores celebraron la bienvenida al 2025 en Times Square con el descenso de la famosa bola de cristal. Y un día después de la festividad, la calma volvió al corazón de Manhattan tras las labores de limpieza.
La lluvia no fue un impedimento para que las personas disfrutaran de la celebración mientras los confetis cubrían la multitud que celebraba entre abrazos, besos y eco de gritos de emoción.
El evento no tuvo percances, y la seguridad fue máxima con la presencia de miles de policías que se encontraban en cada rincón de Times Square y sus alrededores.
Cuando los festejos terminaron, la tarea de limpiar comenzó de inmediato. Más de 250 trabajadores de sanidad se enfrentaron a una montaña de confeti y basura acumulada por la multitud.
Con la ayuda de 45 barredoras mecánicas, 64 sopladoras y 33 camiones recolectores, Times Square recuperó su brillo habitual en cuestión de horas.
El nuevo año arrancó entre risas, abrazos y un espectáculo que, como cada 31 de diciembre, reafirmó por qué esta tradición sigue siendo una de las más emblemáticas del mundo.
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Para el próximo año se estrenará una nueva bola de cristal y se inaugurará el nuevo edificio de One Times Square, que aparte de sostener la esfera, contará con un museo y un observatorio.
