El principal aeropuerto de Haití permanecía cerrado este martes, un día después de que pandillas dispararan a un avión que aterrizaba e hirieran a un asistente de vuelo. Esto mientras el país juramentaba a su nuevo primer ministro en una transición políticamente tumultuosa y violenta.
La Administración Federal de Aviación de EEUU prohibió este martes a aerolíneas estadounidenses volar a Haití durante 30 días tras el ataque.
Gran parte de la capital de Haití quedó congelada tras la ola de violencia que llegó a un punto crucial cuando las pandillas dispararan al avión de Spirit Airlines el lunes, forzando a cerrar el aeropuerto.
Un avión de JetBlue también fue alcanzado por una bala.
El vuelo de Spirit Airlines con destino a Puerto Príncipe fue alcanzado por disparos, lo que obligó a desviarlo a la República Dominicana, mientras que el vuelo de JetBlue Airways que regresaba de Puerto Príncipe fue descubierto con daños de bala después de aterrizar en Nueva York.
Policías fuertemente armados en vehículos blindados fuera del aeropuerto, revisaban este martes los vehículos utilizados para el transporte público que pasaban por el aeropuerto.
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Las escuelas permanecían cerradas al igual que los bancos y las oficinas gubernamentales.
La ONU estima que las pandillas controlan el 85% de la capital Puerto Príncipe.
La violencia se produjo después de que un consejo de transición, encargado de restablecer el orden democrático en Haití, que no ha celebrado elecciones desde 2016, decidiera despedir al primer ministro interino del país, Gary Conille, quien a menudo se enfrentó al consejo durante sus seis meses en el cargo.
A pesar de que Conille declaró ilegal la medida, el consejo rápidamente juró al empresario Alix Didier-Fils-Aimé como nuevo primer ministro interino.
Fils-Aisme prometió trabajar con socios internacionales para restablecer la paz y celebrar las elecciones tan esperadas, una promesa que también realizó su predecesor.
Luis Abinader, quien como presidente de la vecina República Dominicana ha tomado medidas enérgicas contra la migración haitiana, calificó de terrorismo el ataque al avión.
"Este fue un acto terrorista; los países que están siguiendo y ayudando a Haití deberían declarar a estas bandas armadas como grupos terroristas", dijo Abinader en una conferencia de prensa.