Hochul anunció un acuerdo para construir un nuevo estadio de $1.4 mil millones para su ciudad natal Buffalo Bills, con $850 millones de los contribuyentes. La parte del estado sería de $ 600 millones, que Hochul espera incluir en el presupuesto a pesar de las críticas de los legisladores que dicen que el dinero podría gastarse mejor. El condado de Erie, hogar de los Bills, pagaría $250 millones para construir el estadio.
Mientras que la inflación y los precios al alza a raíz de la guerra en Ucrania ahorcan las finanzas de millones de hogares en los Estados Unidos, los reembolsos y el pago de los créditos del IRS apenas cubren los gastos básicos de las familias, esto sin la esperanza de que un nuevo cheque de estímulo del gobierno federal se extienda en 2022.
Ante la dificultad que supone llenar la despensa y el tanque del vehículo familiar, algunos estados están otorgando efectivo a los hogares, ya sea en forma de reembolsos de impuestos a la propiedad o cheques de estímulo.
Nueva Jersey incluso discute la posibilidad de otorgar cheques de $500 a inmigrantes indocumentados que no obtuvieron asistencia del Fondo de Trabajadores Excluidos, además de que los legisladores piden cheques de $500 para compensar los precios de la gasolina.
Por ahora, Idaho, Georgia, Indiana, Nueva Jersey y Nuevo México han aprobado programas de cheques de estímulo y reembolso.
¿Pero qué hay de los neoyorquinos? ¿Obtendrán algún alivio?
Los programas de estímulo en forma de reembolsos de impuestos se están considerando actualmente en Nueva York, California, Hawái, Maine, Minnesota y Kentucky.
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ALIVIO FINANCIERO PARA LAS FAMILIAS DE NUEVA YORK
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Por ahora, Nueva York ofrece alivio a los neoyorquinos de bajos ingresos como parte de un programa de $64 millones en fondos federales destinado a ayudar con el costo de los pañales para las familias en dificultades, los gastos de alimentos para los hogares con niños y adultos mayores, y brindar asistencia de vivienda y reubicación para los sobrevivientes del abuso doméstico.
Pero los neoyorquinos aún esperan el presupuesto del estado para el año fiscal 2023, que se podría conciliar el jueves tras una semana de demora.
En su plan de presupuesto para el año fiscal 2023, publicado a principios de este año, la gobernadora Kathy Hochul propuso un reembolso del impuesto a la propiedad de $1,000 millones para compensar algunas de las cargas financieras que enfrentan los neoyorquinos a medida que aumenta la inflación. El programa devuelve el dinero de los impuestos a los hogares de ingresos medios y bajos, y los hogares de bajos ingresos y las personas mayores reciben mayores beneficios.
En los últimos meses, los trabajadores inmigrantes y los aliados de la comunidad en toda la Ciudad de Nueva York han estado pidiendo a la gobernadora Kathy Hochul y a los legisladores estatales que agreguen $3 mil millones adicionales al Fondo de Trabajadores Excluidos y apoyen a los trabajadores inmigrantes que no pueden acceder a los recursos gubernamentales de ayuda por la pandemia.
El año pasado, se lanzó Fondo de Trabajadores Excluidos para ayudar a los trabajadores inmigrantes de Nueva York que están excluidos de la ayuda de emergencia federal y estatal, incluido el seguro de desempleo y los pagos de estímulo.
El Fondo de Trabajadores Excluidos proporcionó pagos únicos de $15,000.
Sin embargo, la abrumadora demanda agotó los fondos más rápido de lo esperado. Dos meses después de que el fondo estatal de $2.1 mil millones estuvo disponible, se quedó sin dinero.
Ante el aumento vertiginoso de los precios de la gasolina, algunos gobiernos estatales están suspendiendo sus impuestos sobre la gasolina.
Connecticut, Georgia y Maryland aprobaron la suspensión temporal de sus impuestos estatales a la gasolina hasta el momento, según Forbes.
Mientras tanto, Ohio, Nueva York, Nueva Jersey y Virginia Occidental están en el proceso de decidir si también aprobarán las exenciones fiscales estatales.
Pensilvania y Virginia también están considerando suspensiones de impuestos a la gasolina, así como otras opciones. Pensilvania ha propuesto una legislación para brindar asistencia a las familias con los gastos, como el cuidado de los niños, informó Forbes.
Kansas actualmente está considerando compensar los costos de la inflación reciente mediante la reducción de su alto impuesto a los alimentos, que Virginia está revisando como una opción.
Lo cierto es que será hasta el jueves cuando se espera que la Legislatura y la gobernadora Hochul aprueben el presupuesto para el año fiscal 2023, que será también cuando se defina si los reembolsos se emitirán a los neoyorquinos, como lo propuso la mandataria.
